La esencia de Breema: Un enfoque revitalizador de salud y bienestar

Siempre en la búsqueda constante de la salud y el bienestar, me he encontrado recientemente con una práctica fascinante llamada Breema. Esta técnica ancestral de curación basada en el tacto ha sido un soplo de aire fresco en mi vida, ofreciendo una nueva perspectiva de equilibrio y conexión con nuestro propio cuerpo. Comenzar el día con un poco de auto-Breema mientras mi querido perro Max ronca plácidamente y mi gato Nico se estira sobre el tejado es ahora un ritual fundamental para arrancar el día con buen pie.

A pesar de su nombre exótico, Breema es un enlace entre el mundo oriental y occidental de la medicina. Originaria del pequeño pueblo de Breem, en la región montañosa de Kurdistan, esta disciplina se centra en la armonía y equilibrio corporal y mental a través de ejercicios y masajes que promueven la auténtica presencia y conexiones corpo-mentales.

Mi acercamiento personal al Breema

Buscar alternativas holísticas y no invasivas para el cuidado del cuerpo y la mente ha sido siempre mi máxima prioridad. Descubrir Breema ha sido una extensión natural de esta búsqueda. La elección fue casi instantánea. Pensé: ¿Por qué no intentar este enfoque de salud y bienestar basado en el arte de ser presente?

El Breema, llamado también “el arte de ser presente”, me ha permitido comprender y experimentar a un nivel más profundo la conexión entre la mente, el cuerpo y las emociones. He aprendido que cuando estas tres partes de mi ser están en sintonía, siento una paz y una claridad que nunca antes había experimentado. Esta práctica me ha enseñado una forma más natural, armónica y completa de vivir mi vida cotidiana.

Aspectos prácticos de Breema: conectándonos con nuestro ser a través del tacto

El componente principal del Breema es una serie de manipulaciones corporales no forzadas, realizadas en el suelo, que se describen como parecidas a un baile. Aquí se toman en cuenta tanto al dador como al receptor, buscando siempre el equilibrio y la armonía en cada movimiento. En este sentido, es emocionante pensar cómo la terapia de Breema puede ayudar a establecer una relación armónica no solo consigo mismo, sino también con los demás.

Quizás a última hora de la tarde, cuando Max y Nico han gastado toda su energía del día y están echando el sueñecito de la tarde, es cuando mejor me siento para practicar Breema. Me siento en el suelo con una manta, trato de desconectar de todo y me concentro solo en los movimientos lentos y deliberados que la práctica requiere. La calma y la tranquilidad que se propagan por todo mi cuerpo son realmente inigualables.

Los nueve principios de Breema y cómo aplicarlos en nuestra vida cotidiana

Los nueve principios de Breema son un conjunto de pautas que nos ayudan a incorporar esta disciplina en nuestra vida diaria. Estos principios, a pesar de ser simples, tienen la capacidad de producir un cambio significativo en nuestra relación con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea.

Los principios son: Cuerpo Comfortable, Firmeza y Gentileza, Plenitud, Simplicidad, Sin Juicio, Unidad, Armonización con la Vida, Movimiento Único y Sin Apretar. Cada uno de estos principios puede parecer simple por separado, pero su poder radica en su capacidad para trabajar juntos y proporcionar un marco para una vida más centrada, consciente y presente.

La práctica de la Breema me ha facilitado un camino para reconectarme con mi ser y restaurar mi energía vital, ahondando en una nueva visión de salud y bienestar. Recuerda, se trata de un camino de aprendizaje y descubrimiento. No te preocupes si en un principio los resultados no son los esperados, lo importante es la perseverancia. Con el tiempo notarás los cambios, tanto en el cuerpo como en la mente. Por tanto, te animo a que descubras la maravillosa práctica de la Breema: Una forma novedosa, poderosa y equilibrada de conectarte contigo mismo y con el mundo que te rodea.